¡Obstrucciones de agua en varillas de perforación de roca solucionadas! Tres técnicas clave para eliminar fallas de raíz.
En las obras de perforación, las obstrucciones de agua dentro de las barras de perforación son un problema constante: las tasas de penetración disminuyen repentinamente, las plataformas giran inactivas y desperdician energía, y si no se solucionan rápidamente, el cronograma se retrasa y los costos aumentan. La buena noticia es que este problema es en gran medida prevenible. Concéntrese en tres aspectos esenciales: mantener el sistema de lavado libre de obstrucciones, estandarizar los procedimientos operativos y realizar el mantenimiento adecuado del equipo, y podrá eliminar la mayoría de las obstrucciones antes de que se produzcan. A continuación, se presentan técnicas prácticas y probadas en campo que puede aplicar de inmediato.

Resumen: los tres fundamentos. Los bloqueos por agua en las varillas de perforación se producen cuando los recortes se acumulan dentro de la varilla o la tubería, impidiendo que el agua de lavado llegue al frente. Prevenir los bloqueos implica tres aspectos clave: elegir el fluido de lavado adecuado y mantener las líneas limpias; controlar la velocidad de avance y los parámetros de perforación sobre la marcha; y usar y mantener varillas y juntas fiables. Cada área tiene medidas sencillas y prácticas.
Optimice el sistema de lavado: la principal defensa contra obstrucciones. La función del sistema de lavado es evacuar los recortes del pozo y la varilla. Si no funciona correctamente, los recortes se acumulan y la obstrucción es inevitable. Dos prioridades: elegir el fluido de lavado correcto y mantener las tuberías en buen estado.
Medio de lavado: adáptelo a la roca
Roca dura y altamente abrasiva: los recortes son afilados y abrasivos; el agua corriente puede no eliminarlos y puede acelerar el desgaste de la varilla. Utilice un fluido de lavado específico con propiedades lubricantes y de transporte para proteger la varilla y limpiar eficazmente los recortes.
Roca más blanda: los recortes son finos y fluyen fácilmente; el agua común suele ser suficiente y más económica.
Tuberías de lavado: inspeccionar y limpiar periódicamente
Trate las tuberías como un sistema de suministro crítico: revise las conexiones para detectar fugas e inspeccione las líneas internas para detectar la acumulación de recortes. Solucione cualquier falla de inmediato.
Instale un manómetro y un caudalímetro para controlar el caudal. Vigile la estabilidad de la presión y el caudal; cualquier caída o fluctuación repentina debe indicar una inspección y un ajuste para restablecer la capacidad de descarga adecuada.
Estandarizar los procedimientos de perforación: claves operativas para evitar bloqueos. Muchos bloqueos se deben a un manejo inadecuado. Preste atención a estos dos puntos durante la perforación.
Velocidad de avance (alimentación): evitar la velocidad excesiva, buscar la estabilidad
Presionar demasiado rápido para ahorrar tiempo suele producir más recortes de los que el sistema de lavado puede eliminar, lo que provoca acumulación en la varilla. Establezca una velocidad de avance base según la dureza de la roca y evite acelerar a ciegas.
Durante la perforación, controle la evacuación de los recortes y la estabilidad de la máquina; ajuste la velocidad de alimentación ligeramente según sea necesario para que los recortes se eliminen en tiempo real.
Parámetros de perforación: ajuste inmediatamente cuando cambian las condiciones de la roca
Transición de duro a blando: los recortes aumentan y la fluidez mejora: reduzca la velocidad de rotación y aumente el volumen de descarga para que se eliminen los recortes adicionales.
Transición de suave a duro: los recortes se vuelven más abrasivos y pueden compactarse; aumente la velocidad de rotación y mantenga la presión de lavado para mantener el pozo limpio.
La regla general: observe la sensación del taladro y el carácter de los cortes; cambie la configuración tan pronto como cambien las condiciones en lugar de esperar a que se produzca un bloqueo.
Realice un mantenimiento exhaustivo del equipo: elimine los factores de riesgo ocultos. Ni siquiera las mejores prácticas servirán si las varillas o las juntas están defectuosas. Centre el mantenimiento en tres aspectos: elija varillas de perforación de calidad, selle las juntas y realice comprobaciones previas al arranque.
Barras de perforación: compre calidad y reemplace las unidades dañadas
Las varillas baratas o no conformes suelen presentar rebabas, orificios irregulares o grietas que atrapan los recortes y causan un bloqueo inmediato. Utilice varillas con orificios interiores lisos, dimensiones correctas y sin defectos estructurales.
Si una varilla muestra flexión o desgaste en el orificio interno en el campo, reemplácela en lugar de correr el riesgo de obstrucciones repetidas.
Juntas: garantizan un sellado hermético y sin fugas
Las juntas con fugas reducen la presión de lavado e impiden la limpieza de los recortes. Después de cada turno, desmonte las juntas, limpie las superficies de sellado y reemplace los sellos desgastados.
Mantenimiento mensual: elimine el óxido de las roscas de las uniones y aplique un lubricante antiadherente o ligero para mantener las roscas firmes y sin fugas.
Comprobación previa al arranque: realice una comprobación del estado del sistema de lavado en cada turno
Antes de perforar, deje correr el agua de lavado e inspeccione la salida de la varilla: el flujo debe ser uniforme, presurizado y estar correctamente centrado. Cualquier desviación del rociado, flujo débil o pulsación indica un problema.
Si el flujo no es uniforme, limpie las líneas con una pistola de aire a alta presión o un cepillo de alambre, solucione el problema y solo entonces comience a perforar.
Conclusión: la prevención se basa en la atención al detalle. El bloqueo de agua en las barras de perforación no es un problema terminal, sino prevenible. El enfoque es sencillo: elegir el medio de lavado adecuado y mantener las líneas limpias; controlar la velocidad de alimentación y adaptar los parámetros a la roca cambiante; y utilizar las barras adecuadas y mantener las juntas selladas y en buen estado. Incorpore estos pasos a la práctica rutinaria en el sitio, preste atención a las pequeñas señales y reducirá drásticamente, si no elimina, los bloqueos en las barras de perforación, manteniendo la eficiencia de las operaciones de perforación y los cronogramas del proyecto según lo previsto.





